Trabajo aquí junto a "La Manquita" vendiendo almendras desde hace un tiempo. Soy de Italia, mi vida no ha sido fácil, empecé de cero en esta ciudad después de perderlo todo, he tenido la suerte de encontrar personas a las que quiero y me han ayudado. Historias como esta te hacen reflexionar y dar las gracias por lo que tenemos y que no apreciamos por desear más. Espero que poco a poco encuentre su camino, ese que parece tan sencillo pero que muchas veces se nos hace cuesta arriba, ese que nos lleva hasta la felicidad.
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